jueves, 30 de enero de 2014

Tecnología

Tengo dos móviles uno con pantalla táctil y acceso a Internet
más o menos moderno y otro de los de antes muy pequeño
que por no tener ni tiene radio.
Gabriel que tiene ocho años me pidió el móvil para jugar,
tomó el pequeño y tras trastear mucho me espetó:
!Cómo es posible hacer nada sin pantalla táctil! !Esto es de la prehistoria!
Y entonces como un flash de luz aterradora recordé que yo aprendí lo
que era un ordenador con una caja grande en donde lo más brillante eran
aquellas letrillas blancas.... un montón de claves para almacenar y otro tanto
tan sólo para poder escribir mis primeros poemas, sí en la prehistoria de
esta madre ya escribía versos, recuerdo llevar mi pequeña caja rectangular
con algunos disquetes y un cuaderno con muchos códigos. Hoy deslizo mi
dedo por el ratón táctil del pc, por la pantalla de la table, del móvil... Uh.
!Et voila! Todo queda dónde, cómo y cuándo yo lo desee. Mis disquetes...
bueno tengo un pequeño "pendrive" con luz indicadora del que extraigo
una aún más pequeña tarjeta de memoria y, de gran capacidad.
Las cosas para mí han cambiado mucho, pero los más pequeños no
pueden ni concebir nuestros, por entonces, avanzados aparatos tecnológicos.
En casa no tenemos los últimos de los últimos, sin embargo...
I ask myself if ... podrían nuestros más pequeños avanzar si la tecnología
se estancara o si un cataclismo acabase con los medios energéticos que hoy
abastecen las grandes urbes, y no tan grandes, tal vez podrían volver a
un mundo más natural o tal vez tendrán que hacerlo, tal y como van las
cosas medioambientales.

No poem, only fear...